Netatmo lanza omajin, la nueva marca de objetos conectados para el hogar
Cuando abres la válvula de tu radiador de agua caliente, ¿sabes lo que realmente le estás pidiendo a tu sistema de calefacción? Con esta guía, las válvulas de radiador dejarán de ser un misterio.
El termostato controla el agua para la calefacción que produce la caldera. Luego, el agua es transmitida uniformemente a todos los radiadores de la casa. Por su parte, la válvula es el dispositivo presente en cada radiador, que permite controlar la circulación del caudal de agua caliente de forma independiente.
Existen dos tipos de calefacción para tu hogar:
– Tu vivienda posee una caldera individual o una bomba de calor.
El termostato lleva la batuta. Las válvulas controlan el caudal de agua caliente que circula en cada radiador. Aquí el termostato y la válvula trabajan en equipo.
– En tu inmueble hay calefacción central.
En cuanto se enciende la caldera colectiva del inmueble, el agua caliente comienza a circular por las cañerías. En este caso, la válvula representa la única alternativa para regular la temperatura en tu vivienda.
Comprueba la compatibilidad de tu instalación con nuestra herramienta de compatibilidad
El mercado ofrece una gran variedad de radiadores, desde los más tradicionales de hierro forjado a los más modernos, de aluminio. Al momento de cambiar tu sistema de calefacción, debes elegir, igualmente, entre distintos modelos de válvulas. ¿Cómo reconocerlas? ¿Cuáles se adaptan a tus necesidades?
Existen dos tipos de válvulas: las manuales y las termostáticas.
Las válvulas manuales no están graduadas, pero indican el sentido de apertura y de cierre de la llave mediante los signos « + » y « – » (para aumentar o disminuir la cantidad de agua caliente).
Las válvulas termostáticas se caracterizan por tener inscritos los números del 1 al 5. Poseen un mecanismo interno que permite regular la apertura de la válvula para alcanzar y mantener el nivel de confort deseado. Los modelos electrónicos tienen botones y una pantalla que muestra los valores numéricos.
Dentro de la familia de las válvulas termostáticas, encontramos las válvulas inteligentes, como las de Netatmo, que ofrecen funciones inteligentes. Más eficientes y precisas que los modelos tradicionales, estas válvulas te permiten controlar desde tu smartphone la temperatura habitación por habitación.
– Las válvulas manuales permiten simplemente abrir y cerrar el radiador. Su función es menos técnica y son más baratas.
– Las válvulas termostáticas regulan la temperatura según el nivel de confort deseado. En la escala graduada, el nivel 1 corresponde a la temperatura más baja y el nivel 5 a la más alta.
– Las Válvuas Inteligentes Netatmo permiten ajustar la temperatura de una habitación cada 0,5 °C con una gran precisión. Siguen un programa determinado por tu ritmo de vida y las puedes controlar a distancia desde tu smartphone o con la voz.
A diferencia de las tradicionales, estas válvulas presentan funciones de regulación inteligentes.
En resumen, las válvulas termostáticas inteligentes permiten optimizar el control de la temperatura, con una precisión de medio grado. Mientras más moderno sea el dispositivo, más baja será la factura anual de la calefacción: calcula cuánto puedes ahorrar en euros con las soluciones Netatmo.
Ahora que conoces les ventajas de cada sistema —y el posible ahorro de energía que ofrecen—, te estarás preguntando cómo cambiar tu sistema actual.
Para sacar una válvula manual y reemplazarla por un modelo termostático (inteligente o no), es necesario vaciar el radiador. Por lo tanto, te recomendamos que recurras a un profesional. Además, se sugiere hacerlo en verano, cuando la calefacción está apagada.
Tú mismo puedes cambiar una válvula termostática, no necesitas tener conocimientos técnicos. Solo tienes que desenroscar la válvula presente en tu radiador e instalar el nuevo modelo en su lugar.
Este cambio se puede realizar en cualquier época del año, con el radiador apagado o encendido, ya que no hay riesgo de fuga durante la instalación.
Estas simples acciones te permitirán cuidar la llave termostática de tu radiador.
– Cuando la calefacción no esté en funcionamiento (primavera – verano), abre las llaves al máximo. Así evitarás que se bloqueen cuando vuelvas a usar la calefacción.
– Durante todo el año, manipula las llaves cerradas de vez en cuando para que el mecanismo no se atasque. Las Válvulas Inteligentes Netatmo realizan una calibración automática cada 15 días para que no tengas que hacerlo tú.
– Limpia la manija de la llave y de las válvulas con un jabón suave, como un detergente para platos o jabón de Marsella. No utilices productos abrasivos (solventes o ácidos), porque dañarían el dispositivo.
Las Válvulas Inteligentes Netatmo permiten calentar cada habitación con precisión y así adaptarse a tus hábitos. Sin siquiera pensar en ello, tus Válvulas se adaptan durante todo el día a tus necesidades, según la hora y el uso de cada habitación.
¿Te imaginas despertar en un cuarto a 16 °C —como si hubiese sido pensado para otorgarte una calidad de sueño óptima—, ducharte en un cuarto de baño a 22 °C para despertarte con delicadeza y, finalmente, tomar desayuno en una cocina a 20 °C? ¡Con las Válvulas Inteligentes Netatmo es posible!