Netatmo lanza omajin, la nueva marca de objetos conectados para el hogar
Sentir que la vivienda está protegida en todo momento aporta una gran tranquilidad. Por ejemplo, por la noche, cuando nos ausentamos de la vivienda durante el horario laboral, o al partir de vacaciones. Por todo ello el primer paso, antes de comprar la alarma, es decidir qué sistema preferimos:
Las cámaras de seguridad con cables conectados a la red eléctrica necesitan instalación. Esto implica que debe venir un técnico especializado a colocar todo el sistema de cableado y a conectar las cámaras y el resto de dispositivos. En caso de optar por este sistema, es recomendable pedir uno o varios presupuestos a diferentes proveedores para elegir el que más nos interese.
Instalar una cámara de vigilancia inalámbrica no es muy complicado. Cualquier persona con una mínima práctica en bricolaje, puede realizar la instalación sin problemas, con ayuda de la guía de instrucciones del dispositivo.
Una de las mayores ventajas de los equipos de vigilancia inalámbricos es que, al no depender de la corriente eléctrica, el grabador seguirá funcionando y enviando información en caso de corte del fluido por una avería de la red o en el caso de que los ladrones corten los cables en una acción de sabotaje.
Las cámaras de vigilancia de seguridad inalámbricas son realmente una buena elección: son fáciles de instalar y utilizar por todos los habitantes de la vivienda. También permiten una gran flexibilidad y reactividad.
El usuario podrá controlar el sistema de alarma desde el teléfono móvil, a través de una aplicación especial, que también está disponible para la tablet o el ordenador.
¿El prerrequisito indispensable para su funcionamiento? ¡la conexión a internet!
Es decir, para este tipo de dispositivos que funcionan a través de internet, hay que realizar la instalación en tres pasos:
disponer de un router para conectar el kit de dispositivos, entre ellos, el cctv, al wifi de la vivienda.
a continuación, habrá que verificar el alcance o cobertura del mismo para garantizar el buen funcionamiento de todo el kit de cámaras, tanto en el interior como en el exterior, si procediese.
por último, descargar la aplicación para configurar los dispositivos y el control a distancia de la cámara de vídeo y del resto de elementos del equipo.
Ya tenemos la conexión wifi. Ahora trataremos de optimizar las prestaciones de nuestro nuevo equipo sin cable.
El siguiente paso será instalar las cámaras en el emplazamiento, a fin de conseguir la máxima protección y seguridad de hogar.
Si se trata de una cámara de vigilancia exterior, colocarla de forma que la captura de imágenes de vídeo no incluya la vía pública en lugares en los que está prohibido grabar a los particulares.
La grabación de imágenes con una cámara de exterior de uso particular y sin la correspondiente autorización puede dar lugar a sanciones penales debido a la Ley vigente sobre la protección de datos y el derecho a la intimidad.
¡Esto no tiene ninguna dificultad! Las cámaras de vigilancia inalámbricas simplemente se instalan al techo o pared, fijándolas a la superficie con la ayuda de un destornillador y unos tirafondos.
Y, por último, solo falta comprobar la nitidez y calidad de las imágenes y, sobre todo, que la cámara capta bien los lugares exactos que queremos grabar, preservando el derecho a la intimidad de los vecinos y viandantes.
Las alarmas inalámbricas son el sistema idóneo para las viviendas particulares, especialmente para las de pequeñas o medianas proporciones. También son adecuadas para instalarlas en un local comercial, con independencia de los metros cuadrados que tenga.
Por su parte, las alarmas con cables están más indicadas en casas de gran tamaño, locales o naves industriales, centros comerciales o, edificios de oficinas.
Los productos de seguridad conectados a Internet, entre ellos, la Cámara Interior Inteligente Netatmo y la Cámara Exterior Inteligente Netatmo, han sido concebidos para que se puedan instalar de forma fácil y rápida por cualquier persona más o menos habilidosa.