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La contaminación del aire interior de las viviendas no es algo que tomar a la ligera. Aunque es completamente invisible, sus efectos nocivos son muy reales para la salud de las personas que viven dentro de ellas. Es decir, ¡nosotros y nuestras familias!
En 2014, un estudio de la agencia francesa ANSES ("Estudio exploratorio del coste socioeconómico de los contaminantes del aire interior") reveló que casi 20.000 muertes al año son atribuibles a la contaminación del aire en Francia. Una cifra enorme que demuestra la urgencia y la importancia de tomar medidas adecuadas, tal y como propone la Environmental Protection Agency (Agencia de Protección Medioambiental).
Entre sustancias químicas nocivas, desechos domiciliarios sólidos y generación de residuos, hidrocarburos aromáticos policíclicos, aguas residuales domésticas, humedad, fibras, gases radioactivos, monóxido de carbono, tabaco, partículas finas de ozono, combustibles sólidos como la madera, compuestos orgánicos volátiles COV, humedad y otros contaminantes, la calidad del aire y, por tanto, nuestra salud, están amenazadas desde dentro.
Por tanto, es más que probable que el aire de nuestro hogar esté contaminado. Pero, ¿hasta qué punto lo está? Esa es la cuestión. Saber de dónde proviene esta contaminación es determinante para encontrar la solución.
Ya es posible conseguir mediciones precisas en tiempo real y tener la información más completa de la calidad del aire interior del hogar. Los sensores de la Estación Meteorológica Inteligente Netatmo ofrecen información detallada en el teléfono móvil para saber cuál es el mejor momento de ventilar. La salud es lo más importante, ¡no dejemos que la contaminación la perjudique!
En realidad, las actividades humanas producen muchas emisiones de diferentes componentes volátiles y contaminantes. El bricolaje es un ejemplo perfecto de ello. También el uso de cosméticos: a menudo contienen ingredientes nocivos para el medio ambiente. En cuanto a los productos para el hogar, sabemos que las sustancias tóxicas que contienen son innumerables. ¿Fumadores en casa? ¡Eso es aún peor! El humo del tabaco contiene muchas sustancias tóxicas. También durante y después de cocinar, se recomienda airear y ventilar. ¿Sabía que incluso respirar emite dióxido de carbono? En resumen, el aire dentro del hogar está contaminado y todo lo que tenemos que hacer para purificarlo es garantizar una renovación adecuada del aire.
Los animales, plantas y otros organismos vivos también contaminan el aire interior. Así mismo, hay que prestar atención al suelo, y a algunos materiales de construcción y decoración como los aislamientos, barnices y colas.
Finalmente, no olvidemos el aire exterior: el aire fresco es necesario para limpiar el aire interior, pero también puede ser otra fuente más de contaminación: los pesticidas, gases de los tubos de escape, el polen, o el polvo son contaminantes bien conocidos. Sin embargo, ¡eso no es una razón para dejar las ventanas cerradas!
La Estación Meteorológica Inteligente Netatmo ayuda a controlar el ambiente interior del hogar. Permite acceder fácilmente a la información, y tomar iniciativas en tiempo real para mantener un aire saludable en el interior. “Muy bien”, “Promedio”, “Advertencia”: las señales son claras y límpidas, ¡atención a las señales de alerta!
Al hablar de contaminación interior, es probable que hayamos oído hablar de los COV. Se trata de un acrónimo que se refiere a los “compuestos orgánicos volátiles” sustancias de origen natural o humano que afectan negativamente a la calidad del aire interior. Su papel en la contaminación interior, ha quedado demostrada en los últimos años.
Hay que tener en cuenta que, en Europa, todos los COV contienen carbono y otros elementos como hidrógeno, azufre, halógenos, etc.
Estos compuestos nocivos tienen una volatilidad muy alta y se propagan fácilmente, provocando muchos efectos negativos directos o indirectos sobre el medio ambiente y la salud.
Butano, etanol, acetona, tolueno, benceno… la lista es larga y sus nombres probablemente no significarán nada el ciudadano corriente. Pero hay que saber que están omnipresentes tanto en nuestras viviendas ¡como en todas las demás!
Ahora ya lo sabemos: el aire interior de nuestra casa está contaminado. Pero ni es algo inevitable ni nuestra salud debe resultar perjudicada por ese motivo.
Lo primero que hay que hacer para combatir la contaminación interior es airear entre 10 y 15 minutos por la mañana y por la noche, ventilar eficazmente, y limitar en la medida de lo posible las emisiones contaminantes.
¿Qué pasa con las estaciones meteorológicas, purificadores, depuradores y otros sensores? Estas soluciones están empezando a utilizarse cada vez más, en muchos países, dentro y fuera de la UE. Las ventas de este tipo de aparatos se van incrementando a medida que evolucionan las tecnologías.
Una cosa es cierta, este mercado indica que cada vez somos más conscientes de la contaminación del aire interior y sus consecuencias. Cada vez son más las personas que quieren reducir los contaminantes para mejorar su salud.
Las "estaciones meteorológicas" son dispositivos eficientes y completos que no solo capturan la calidad del aire, la humedad y la temperatura. También avisan en caso de mala calidad del aire, cuando se requiera ventilación inmediata.
Cierto tipo de baldosas e incluso pinturas pueden mejorar la calidad del aire dentro de la casa: son los materiales de filtración, ionización y fotocatálisis que ofrecen ciertos fabricantes.
Por supuesto, la calidad de estos dispositivos tecnológicos dependerá de la marca, el precio y el trabajo de I+D que se haya invertido en la fabricación de los aparatos.
La contaminación del aire interior es, por tanto, un tema que no debe tomarse a la ligera ya que es mala para la salud. Incluso si la casa está limpia, bien ventilada y con un mantenimiento adecuado, el aire sigue contaminado. Obviamente, está en nuestra mano limitar esta contaminación. Aireación, ventilación, estación meteorológica … lo único que hay que hacer es elegir la forma más adecuada de luchar contra la polución del aire interior.