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Es frecuente oír hablar de la presión atmosférica. Por ejemplo, en los pronósticos meteorológicos que vemos en televisión. El problema es que pocas personas entienden realmente para qué y en qué consiste medir la presión atmosférica. Sin embargo, los navegantes y aficionados a la aeronáutica se equipan con un barómetro para medir las variaciones de presión atmosférica y así recibir previsiones meteorológicas fiables, ya que dichas condiciones de la atmósfera están estrechamente relacionadas con el ejercicio de su actividad.
Vayamos por orden, empezando por hablar del concepto de presión atmosférica. La masa de la atmósfera ejerce una presión promedio de 1013 hectopascales (hPa) sobre la superficie terrestre.
Hay que tener en cuenta que la presión del aire disminuye con la altitud, porque cuanta más altitud, más se enrarece la atmósfera. De 0 a 1000 metros de altitud, esta presión disminuye en promedio 1 hPa cada 10 metros. Cuando alcanza una altitud de 5,5 kilómetros, la presión atmosférica es de solo 500 hPa (como mínimo, dos veces menos que en la parte más baja de la Tierra).
Estas variaciones de presión originan los vientos que, por un mecanismo complejo que también involucra la temperatura del aire, condicionan el clima.
Por lo tanto, medir la presión atmosférica es útil para pronosticar el clima, pero no puede reemplazar por completo la medición de la temperatura o la humedad.
Anteriormente, se utilizaba el milibar (mb) como unidad de medida de la presión atmosférica. Pero hoy en día, dicha presión atmosférica se mide en pascales o en hPa (hectopascal). Una breve lección de historia nos hará entender mejor la procedencia del hPa.
Pascal fue un gran científico del siglo XVII que trabajó en el tema de la presión atmosférica. Según él, 1 pascal = 1 N / m2. En este caso, N representa el Newton, la unidad de medida de la fuerza. La presión atmosférica y, por tanto, el pascal, definen la fuerza por unidad de área y recibe ese nombre en honor al científico.
El primer instrumento para medir la presión atmosférica se creó en 1647: fue el primer barómetro.
NOTA: la presión atmosférica se expresa con mayor frecuencia en hPa o hectopascales, porque el pascal es demasiado pequeño: 1 hPa = 100 pascales.
¿Medir la presión atmosférica con precisión, junto al resto de datos meteorológicos? ¡Es fácil, con la Estación Meteorológica Inteligente Netatmo ! Podrá acceder a todos los datos meteorológicos que le interesen y también, entre otros, a los de la calidad del aire interior o el nivel de sonido, desde su teléfono móvil.
Cuando hablamos del clima, imaginamos que se trata de medir la temperatura para ver si hará frío o calor, el viento, la humedad (cantidad de vapor de agua en el aire), los pronósticos de luz solar o la probabilidad de lluvia. Esto no está del todo mal … pero está incompleto.
La meteorología está ligada a la presión atmosférica de la superficie terrestre. Para hacer el pronóstico del tiempo, también se mide la presión atmosférica de la superficie terrestre (en hPa). Esta medición, realizada con un dispositivo con función de barómetro, es un valioso indicador para hacer los mapas de presión atmosférica y pronóstico del tiempo, en particular, del viento.
La presión atmosférica también es un indicador importante y vamos a ver por qué. En primer lugar, hay que saber que, en las zonas templadas de la corteza terrestre, la presión varía en promedio de 950 hPa a 1050 hPa. Sin embargo, la presión puede cambiar muy rápidamente, lo que indica que habrá mal tiempo si baja rápidamente y un tiempo bastante agradable si sube.
En cuanto a cifras, hay que retener las siguientes: 1010 hPa y 1020 hPa. Cuando la presión atmosférica disminuye por debajo del primer umbral de 1010 hPa, se dice que el clima entra en zona de depresión (o simplemente de condiciones de bajas presiones). Por el contrario, cuando sube por encima de 1020 hPa, hay una presión alta (o condiciones de alta presión).
Las variaciones de la presión atmosférica, por lo tanto, tienen una influencia directa (aunque todavía insuficientemente explicada a día de hoy) sobre la temperatura, el tiempo y el clima general en la Tierra.
Por lo tanto, medir la presión atmosférica que hay a nuestro alrededor permite anticipar con precisión el clima para las próximas horas y para saber si tendremos ciclón o borrasca.
Con la Estación Meteorológica Inteligente Netatmo podremos medir la temperatura, humedad, calidad del aire, clima... y sobre todo, la presión atmosférica. Es decir, los datos que realmente importan: ¡el aire ambiental de nuestro entorno y el que tenemos en el interior de nuestra casa! Además, podrá ver también fácilmente el historial de variaciones para predecir y anticipar mejor los cambios.
Barómetro de mercurio, barómetro aneroide, estación meteorológica... ¿cuáles son los instrumentos de referencia para medir la presión atmosférica en la superficie terrestre?
La temperatura se mide con el termómetro, la humedad, con el higrómetro, la velocidad del viento, con un anemómetro... y la presión atmosférica, con un barómetro (u otro dispositivo con esta función, como por ejemplo, una estación meteorológica).
Hoy en día, el barómetro aneroide es el instrumento más utilizado para medir la presión atmosférica.
En resumen: el barómetro es el instrumento para medir el volumen de la presión de la atmósfera sobre la superficie de la Tierra y la expresa en hPa. Saber interpretar esta medida como hemos explicado permite anticipar los cambios en el clima: ¿es probable que llueva?, ¿hará buen tiempo? Nada es seguro, por supuesto, pero las predicciones son fiables. Es mediante la combinación de la temperatura, la presión, el viento y otros indicadores, la forma en que los meteorólogos establecen las previsiones que consultamos en el móvil o nos ofrecen en televisión en los mapas de isobaras.
Un último apunte: ¿por qué colocar un sensor (barómetro o estación meteorológica) en el interior de la casa para medir la presión exterior? Simplemente porque la presión es idéntica dentro que fuera: ninguna casa es hermética a la atmósfera exterior.
¡Conocer por anticipado y con precisión el clima, el sol o la lluvia para los próximos días no es magia! Pero para hacerlo con la mayor fidelidad posible, lo ideal es equiparse con un barómetro, un termómetro, un higrómetro, un anemómetro o una estación meteorológica que combine todas estas funciones. ¡Medir la presión del aire, la temperatura, la humedad y la velocidad del viento es la clave para obtener pronósticos realistas!