Netatmo lanza omajin, la nueva marca de objetos conectados para el hogar
Puede que sepamos algo acerca de las válvulas termostáticas: su funcionamiento, ventajas, modelos o el ahorro de dinero y energía que proporcionan. Pero si no es así, hagamos juntos un repaso de estos elementos: una cosa es cierta y es que la calefacción independiente, inteligente y económica ya es una realidad. Si usted también desea ahorrar y hacer un consumo responsable y sostenible, ¡la válvula termostática es el accesorio que necesita!
¿Quiere dejar de perder el tiempo regulando la temperatura de los radiadores y mantener una temperatura perfecta en su hogar? La válvula o cabezal termostático está hecho para usted ya que podrá regular e incluso controlar la temperatura de los radiadores. Con la válvula termostática para el radiador podrá ajustar el termostato para programar la temperatura interior de cada habitación y no tendrá que volver a ocuparse de ello. ¡Adiós al malgasto de energía!
¿Cómo funciona exactamente este dispositivo? En realidad, depende del tipo de válvula. Las de mayor tecnología funcionan por conexión de diferentes elementos. Por ejemplo, si el termostato sube en el interior de la vivienda porque el sol está cayendo a plomo, el radiador automáticamente disminuirá el flujo de agua, y a la inversa. En caso de caída de la temperatura, el flujo aumentará.
¿Magia? No, ¡tecnología! Y todo ello, a un precio asequible.
La válvula termostática tiene muchas ventajas una vez instalada en un radiador: no solo evitará el sobrecalentamiento y el exceso de consumo energético, sino que además este ahorro de energía servirá para limitar tanto el gasto como nuestra huella de carbono.
Las válvulas termostáticas son el equipamiento perfecto para calentar por fin de forma inteligente, con menos esfuerzo y menos gasto energético.
Al ser un accesorio que permite mejorar la eficiencia energética de nuestra vivienda, podemos acogernos a las ayudas públicas que ofrece el gobierno para las obras de rehabilitación o compra de elementos más eficientes. Entre ellas, están los créditos para la eficiencia energética (CEE), y las ayudas que conceden los ayuntamientos y comunidades autónomas. También, a nivel nacional, están las subvenciones previstas en el Plan estatal de Vivienda 2018-2021. De todas formas, las válvulas tienen precios muy asequibles por lo que posiblemente no tengamos necesidad de recurrir a estas subvenciones.
Por todo esto, los cabezales termostáticos son un accesorio cada vez más habitual en las viviendas. Por tanto, la siguiente cuestión que se nos plantea es: ¿qué modelo elegir?
Para regular la calefacción de forma eficiente y automatizada, tenemos varias opciones:
Entre los diferentes tipos de válvulas que hay en el mercado las hay con mayor o menor nivel de tecnología y, por tanto, con mayor o menor número de ventajas:
Las válvulas termostáticas manuales son bien conocidas ya que también son las más antiguas, baratas y populares. Sus funcionalidades son limitadas, aunque eficaces sobre todo para espacios pequeños. No tienen ninguna autonomía y hay que cerrarlas y abrirlas de forma manual.
Las válvulas termostáticas electrónicas o programables se pueden controlar con más precisión y además son más ergonómicas y funcionales. Se puede programar la temperatura con gran exactitud, por grados o medios grados, aunque no sean realmente “digitales”. El flujo de agua se regula de forma más precisa y la pieza se calienta de forma más eficaz.
Las válvulas termostáticas digitales son las más evolucionadas del mercado. Son las que permiten disfrutar de una calefacción realmente inteligente. Estas válvulas con mando termostático para los radiadores son independientes, conectadas a internet y con geolocalización. Esto les permite “aprender” a conocer mejor la rutina y costumbres de los habitantes de la vivienda (cuando están en la casa, qué lugares se usan más, etc.), y basándose en esa información regulan la temperatura de forma mucho más precisa.
Como acabamos de ver, ya no hay ninguna excusa para no incorporar la tecnología a nuestro sistema de calefacción. ¡Descubra una nueva forma de calentar su vivienda de manera inteligente con una válvula inteligente adicional, una válvula termostatizable o válvulas con mandos termostáticos electrotérmicos!
Ahora solo falta elegir el modelo perfecto en función de diversos criterios: nuestras necesidades, presupuesto, sensibilidad ecológica o el tamaño de las habitaciones. Entonces, ¿cuál elegir? Regular la temperatura de una estancia con una válvula de radiador termostática siempre será una buena idea, por lo que cualquiera de las opciones que elijamos será positiva.
Sea cuál sea nuestra elección, las válvulas de radiador siempre son una inversión rentable con la que conseguiremos realmente un importante ahorro de dinero y energía, así como un impacto positivo en el medio ambiente. Pero, en la práctica ¿qué podemos esperar? Esta es la respuesta:
Las válvulas termostáticas inteligentes Netatmo se acompañan de un pack de arranque para calefacción colectiva. Las válvulas inteligentes y conectadas permiten un ahorro de unos 300 euros de media al año en la factura energética, según un estudio realizado por Netatmo en 2016. Eso sin contar el gran gesto ecológico que hacemos al disminuir nuestra huella de carbono.
La válvula termostática es una inversión que merece la pena a todos los niveles, incluido el de la rentabilidad. Después de todo, el ahorro económico es uno de los principales objetivos que queremos conseguir al invertir en un accesorio para mejorar nuestro nivel de eficiencia energética. El precio de las válvulas termostáticas de radiador es muy asequible si lo comparamos con los beneficios que aporta. Por tanto, ¿es buena idea invertir en una válvula termostática? La respuesta parece evidente cuando hablamos de cifras.
Según la Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMA) el importe de la factura energética desciende un 5% como mínimo después de la instalación de una válvula termostática.
En cuanto al precio, podemos encontrar válvulas desde 20 euros para la válvula manual más básica hasta unos 80 para las de mayor tecnología, que son las que ofrecen un mayor ahorro. También hay que añadir el importe de la instalación de las válvulas termostáticas por parte de un técnico profesional, si no queremos hacerla nosotros mismos.
El precio da una válvula es bastante asequible y por tanto podemos permitirnos gastar el importe de la instalación, que suele rondar los 50 euros aproximadamente. Así tendremos la seguridad de que todos los accesorios funcionarán correctamente.
Una vez que la válvula termostática ha sido correctamente instalada en el radiador, enseguida notaremos que la temperatura de la habitación está perfectamente regulada.
El termostato digital inteligente Netatmo es un termostato inalámbrico que se conecta a la caldera y proporciona un gran confort térmico. ¡Podremos controlarla y programarla desde el móvil para mantener en todo momento una temperatura perfecta!