¿Qué es una estación meteorológica inteligente?

La estación meteorológica conectada marca la diferencia al enviar y procesar datos meteorológicos

Las estaciones meteorológicas conectadas o inteligentes no solo toman sus propias medidas meteorológicas. Están mucho más centradas en la comunicación y el procesamiento de datos.

Estos datos meteorológicos (temperatura, humedad, pronóstico de lluvia, etc.) se capturan, recopilan, procesan, combinan y envían al usuario mientras se almacenan y compilan para que luego puedan realizar análisis más profundos a lo largo del tiempo.

En pocas palabras, la estación meteorológica le permitirá realizar sus propias mediciones meteorológicas en casa y tenerlas disponibles directamente en su teléfono inteligente.

Bastante práctico, ¿no?

En definitiva, ya no necesitará consultar y manipular su estación meteorológica para obtener la información que necesite en un momento dado. Este tipo de dispositivos conectados a Internet también son muy útiles cuando no estamos en casa ya que podremos acceder a la información en el momento y lugar deseado. Al estar conectada la estación meteorológica a otros dispositivos inteligentes, podremos actuar directamente de forma remota (para ventilar, por ejemplo).

Para obtener datos más completos en nuestra estación meteorológica conectada, podemos vincularla a otros sensores, como un anemómetro o un higrómetro conectado. Esto le permitirá, si se utiliza bien, medir también otros datos meteorológicos más específicos.

Algunas estaciones meteorológicas digitales están conectadas a un módulo interior por lo que también pueden recopilar, procesar y comunicar datos relacionados con la calidad del aire dentro del hogar.

En resumen, las opciones son muy variadas y numerosas. Con una estación meteorológica wifi con sensor, ningún dato se deja al azar.

Medir es también el primer paso para mejorar y hacer cambios, por lo que, al elegir una estación meteorológica digital con sensor interior podrá reducir la contaminación interior, cultivar mejor el jardín o planificar mejor las salidas deportivas.

La principal ventaja de una estación meteorológica conectada

Las estaciones meteorológicas conectadas suelen presentarse verdaderas joyas tecnológicas (¡y meteorológicas!).

Gracias a sus sensores, el módulo exterior de una estación meteorológica conectada proporciona una gama extremadamente amplia de datos meteorológicos en tiempo real. Pero, a diferencia de la información del tiempo convencional, no se trata de un dato meteorológico cualquiera, sino de lo que realmente nos preocupa, es decir, ¡los datos medidos justo en frente de casa!

A menos que tengamos que viajar allí, la temperatura, humedad o el viento que haya en la gran ciudad a 60 kilómetros de donde vivimos, no nos importará demasiado.

Gracias a la estación meteorológica conectada instalada en casa, ya no tendremos que depender de los sensores de la AEMET y otros dispositivos situados más o menos lejos de nuestra casa, cuya precisión sea, por tanto, más o menos imprecisa. Por el contrario, con su propia estación meteorológica los datos que le interesen estarán ultrageolocalizados.

Al tomar sus propias medidas como un experto y poder acceder a ellas fácilmente desde sus dispositivos conectados a Internet, entrará en una nueva dimensión a la hora de estar informado sobre el tiempo y el clima en general.

Con una estación meteorológica conectada, ganará en la calidad de la información y en libertad de movimientos. Pero, sobre todo, disfrutará de una precisión inigualable a la hora de acceder a las previsiones meteorológicas.

¿Cómo funciona una estación meteorológica conectada?

Las estaciones meteorológicas inteligentes funcionan de manera muy similar a una estación meteorológica normal, en muchos aspectos (y no en los menos importantes).

Su caja de medición exterior, resistente a las duras condiciones climáticas, mide los datos meteorológicos de su entorno exterior. El cuadro interior también permite tomar medidas, aunque sirve, sobre todo, para interpretar y mostrar los datos meteorológicos recopilados.

Estos 2 pequeños componentes de cualquier estación meteorológica conectada, verdaderos dispositivos conectados por derecho propio, intercambian sus datos a través de ondas de radio. A continuación, la unidad interior de la estación meteorológica conectada envía los datos a través de la red WIFI (Internet) o Bluetooth, directamente a un dispositivo móvil, como, por ejemplo, el teléfono inteligente o la tablet.

Es en este último dispositivo donde se pueden consultar los datos de temperatura, humedad o presión, recopilados por la estación meteorológica conectada, mediante una aplicación que el usuario puede configurar.

Tenga en cuenta que, a pesar de su lado altamente tecnológico, la estación meteorológica inalámbrica wifi es generalmente muy fácil de usar una vez instalada.

Por supuesto, hay un período de adaptación y puesta en marcha, pero bastará con seguir al pie de la letra las instrucciones digitales, intuitivas e ilustradas, que suele indicar la propia aplicación de la estación meteorológica conectada.

Es posible comprar una estación meteorológica conectada de calidad a partir de unos cien euros. La mayoría de los modelos se venden a precios de entre 100 y 200 € aunque no es necesario tanto, ya que esos modelos suelen ser dispositivos muy sofisticados, pensados para profesionales. Una cosa es segura, por un precio tan asequible, ¡sería una pena prescindir de un aparato tan eficiente! Obviamente, todo dependerá también de su uso.